Tras la muerte de Qasem Soleimani el pasado 3 de enero, los conflictos entre Irán y Estados Unidos siguen aumentando.
“Se alzará la bandera del general Soleimani en defensa de la integridad territorial del país, la lucha contra el terrorismo y el extremismo en la región, y continuará la resistencia a los excesos de Estados Unidos. Irán se vengará de este crimen atroz”, expresó el presidente iraní, Hassan Rouhani, tras la muerte del comandante.
Soleimani, “el comandante en la sombra”, se encontraba en la lista de “terroristas más buscados” de Washington, acusado de ser el responsable directo de la muerte de cientos de soldados estadounidenses durante la guerra de Irak.
Este suceso de venganza dio inicio a los temores por una tercera guerra mundial...
Días después, la Guardia Revolucionaria iraní confirmaba haber lanzado miles de misiles contra dos bases militares en territorio de Irak, donde se encontraban tropas estadounidenses.
Cientos de iraníes han protestado contra el gobierno Islámico por derribar “por error” un avión Boeing 737 y causar 176 muertes. Así mismo, la actitud de Estados Unidos en la región también ha generado dudas.
Con la retirada de sus tropas de Siria, dio paso a una invasión por parte de Turquía, generando un éxodo de miles de personas como la falta de apoyos en la OTAN para aumentar su presencia en Oriente Medio y su proximidad a la monarquía saudí sigue cuestionando su apariencia de impecabilidad en materia de derechos humanos.
Países de la Unión Europea como Francia, Alemania y el Reino Unido han respondido con unas duras declaraciones hacia Irán mediante un comunicado conjunto, en el que exhortan a la República Islámica a no incumplir los acuerdos nucleares de 2015 y denuncian su papel de desestabilizador en la región y su programa balístico.
La Alianza Evangélica Mundial (WEA), también se ha manifestado sobre el conflicto entre Estados Unidos e Irán, el secretario general de la entidad, Ephraim Tendero, ha hecho un llamado público a “los líderes de estos países y sus aliados, a resistirse al uso de toda retórica hostil y a desescalar la crisis actual”, pidiendo diálogo y la eliminación de las sanciones que “afectan desproporcionadamente a los civiles”.
“La protección de los cristianos y otras comunidades religiosas requiere a la comunidad internacional un apoyo activo por la paz y la estabilidad”. “La WEA llama a la oración por los líderes políticos y militares de Estados Unidos, Irán e Irak, para que busquen y tengan sabiduría pacificadora sobre todo”, remarcó Tendero.
Los analistas concluyen que, durante más de 20 años, Irán ha intentado desarrollar un régimen chiita en la zona insertando sus células en otros países, lo que ha generado una gran inestabilidad en la región y, sobre todo, conflictos bélicos”.
Podemos ver una vez más que la Palabra de Dios se cumple con plenitud como dice en:
Marcos 13:7
"Mas cuando oigáis de guerras y de rumores de guerras, no os turbéis, porque es necesario que suceda así; pero aún no es el fin."