Cristianos y otros pueblos de fe ejecutados, encarcelados y torturados por practicar sus religiones. Lamentablemente, en muchos países del mundo esta es una realidad diaria.
Este año, la comisión recomienda que el Departamento de Estado agregue cinco países adicionales a su lista de principales delincuentes: India, Nigeria, Rusia, Siria y Vietnam.
La comisión, dirigida por Perkins, un cristiano, aboga por el ejercicio libre de todas las religiones en todo el mundo.
"Hay muchos lugares peligrosos cuando se trata de ser cristiano, esto realmente proviene de la cosmovisión cristiana occidental de que cada persona está dotada con el derecho de su Creador de elegir si seguirlo o no. Quiero decir, vemos eso registrado en el libro de Génesis y así como cristianos por los que hemos abogado, el derecho de toda persona a creer o no creer. Ahora, obviamente, esperamos que elijan seguir a Dios, pero luchamos por ese derecho y esa libertad para todas las personas”.
La pandemia global ha agregado una capa de carga para los pueblos perseguidos.
"Algunos han usado esto como un disfraz, una cortina de humo, como una excusa para mostrar hostilidad hacia la religión y hemos llamado a esos países", dice Perkins.
La comisión se enfoca exclusivamente en la libertad religiosa internacional, pero en su papel privado, Perkins está monitoreando cómo la pandemia ha afectado la libertad religiosa en los Estados Unidos.
"Hemos tenido bolsillos en los Estados Unidos donde ha habido, diría, una violación de la libertad religiosa y el libre ejercicio de esa libertad. Afortunadamente, el Departamento de Justicia, aquí en los Estados Unidos, intervino en esos casos".
"Me alienta el hecho de que los cristianos en los Estados Unidos de América están cada vez más conscientes de la persecución de otros creyentes y otras personas de fe y están tomando medidas para abordarla, y está siendo facilitada por una administración que ha hecho la libertad religiosa su objetivo número uno de política exterior, que es enorme, tremenda", concluyó.
Y a medida que las empresas y la sociedad en general comienzan a abrirse nuevamente, él cree que las iglesias deberían ser las primeras en la fila.